08, 2015
Los pasajeros serán llevados a un viaje virtual de dos horas por la ciudad mexicana con un tour gastronómico poblano
A primera vista parece un tranvía típico que recorre las calles de Bruselas al caer la noche, a no ser por su color blanco con sellos de la marca Tram Experience en negro, en lugar del amarillo-azul, con el logotipo de la empresa pública de transportes del país.
Sin embargo, los pasajeros que embarquen en sus vagones en 2015 serán llevados a un viaje virtual de dos horas por la ciudad mexicana de Puebla, cuya cocina tradicional será la estrella del nuevo menú de ese tren gastronómico creado por la oficina de turismo de la capital belga.
Tram Experience es un tranvía de dos vagones convertidos en restaurante efímero de alto nivel en el que, seis días a la semana, los clientes pueden degustar un menú “gourmet” de tres platos mientras transitan por los principales puntos turísticos de Bruselas.
“Lo creamos en 2012 en el marco del festival gastronómico de Bruselas y decidimos mantener el proyecto como herramienta para promocionar a la ciudad” mexicana, explicó a Notimex el creador del proyecto, Olivier Marette.
En su tercera edición, inaugurada en agosto pasado bajo el lema “El mundo en su plato”, está dedicada a la cocina de 11 países, entre ellos México, representado por la culinaria poblana.
“La cocina mexicana es una cocina que la gente no conoce muy bien en Bélgica. Van a un restaurante tex-mex y creen que están comiendo mexicano, pero hay mucho más que eso”, dijo Marette.
Puebla, así como las demás ciudades que participan del actual Tram Experience -entre ellas Lyon (Francia), Barcelona (España), Osaka (Japón) y la propia Bruselas- fue elegida por hacer parte de Délice, una red de intercambios entre ciudades que pretenden destacarse mundialmente por su gastronomía.
Marette resaltó la importancia de Puebla como “cuna de la cocina mexicana”.
“La cocina poblana es una de las más representativas de la cocina mexicana, llena de tradiciones y fusiones”, observó.
Puebla hace parte del cuarto menú de la vuelta al mundo gastronómica, llamado “Revolución Alimentar Norteamericana”, que incluye también platos de Montreal (Canadá) y Chicago (Estados Unidos) y estará disponible del 20 de enero al 8 de marzo de 2015.
Cada ciudad eligió un chef renombrado para elaborar las recetas, que serán realizadas en el tranvía por el chef belga Denis Roberty.
El creador de los platos poblanos es Ángel Vázquez, propietario de los restaurantes Intro y Kafeina en Puebla y quien además ha sido premiado en diversos concursos gastronómicos internacionales.
“Lo que me interesó de su trabajo fue que hace una cocina moderna aliada a la tradicional, con total respeto a las tradiciones locales”, enfatizó Marette.
El menú del capítulo norteamericano cambiará a cada dos semanas, dando la oportunidad para que las tres ciudades se luzcan en todas las partes de la cena.
En las dos primeras semanas Vásquez se encargará del postre, un mousse de chocolate y avellanas acompañado de garapiñado, gelatina de maracuyá, espuma de plátano y flores.
En seguida, servirá el plato principal, compuesto por pato con salsa pipián y puré de frijoles negros.
Para concluir su participación, eligió como aperitivos sopes de erizo de mar, picos de gallo y chorizo verde; y robalo con tacos de cebolla y mayonesa de achiote.
También servirá en esas dos últimas semanas la entrada: escalopes de aguachile con pepino, cebolla roja, aguacate quemado y brotes de cilantro.
Vásquez envió al chef belga Roberty las recetas detalladas acompañadas con fotografías.
Ahora los dos tienen previsto iniciar una serie de contactos para aceitar los detalles de los preparativos.
El encargado de cocinar los platos tiene que prever si se pueden realizar en el espacio diminuto del tranvía o, de lo contrario, buscar soluciones junto con el creador.
“Buscamos respetar al máximo lo que decide el chef invitado. Lo único que hacemos es proponer sustituir algún producto que no se pueda importar por un equivalente local o cambiar alguna presentación que no se pueda realizar en un tranvía”, afirmó Marette.